Con la ayuda de la microscopía crioelectrónica, se obtuvieron resultados preliminares a nivel molecular de la proteína espiga de la variante Ómicron, las cuales permitirán comprender su comportamiento.
De acuerdo a un artículo publicado el pasado jueves en la revista científica Science, científicos de la Universidad de la Columbia Británica, Canadá, publicaron el primer análisis estructural a nivel molecular de la proteína espiga de la variante Ómicron. Hallazgos que podrían explicar por qué esta mutación es altamente transmisible y podrán ayudar a acelerar el desarrollo de tratamientos efectivos.
Sriram Subramaniam, profesor de la facultad de medicina de la UCB y director el estudio, comentó que "la variante ómicron no tiene precedentes por tener 37 mutaciones de proteínas de pico, que son de tres a cinco veces más mutaciones que cualquier otra variante que hayamos visto". Y explicó que "esto es importante por dos razones. En primer lugar, porque la proteína espiga es la forma en que el virus se adhiere a las células humanas y las infecta. En segundo lugar, porque los anticuerpos se adhieren a la proteína espiga para neutralizar el virus", dijo.
"Por lo tanto, las pequeñas mutaciones en la proteína espiga tienen potencialmente grandes implicaciones sobre cómo se transmite el virus, cómo nuestro cuerpo lo combate y la efectividad de los tratamientos", afirmó Subramaniam.
En el estudio se empleó la microscopía crioelectrónica y otras pruebas con la finalidad de comprender cómo las mutaciones afectan el comportamiento de la variante a nivel molecular.
RESULTADOS PRELIMINARES
El análisis estructural probó que las mutaciones R493, S4496 y R498 crean nuevos puentes salinos y de hidrógeno entre la proteína espiga y el receptor de células humanas ACE2, los cuales parecen aumentar la afinidad de unión, mientras que otras mutaciones K417N comienzan a perder fuerza en este enlace.
"En general, los hallazgos muestran que ómicron tiene una mayor afinidad de unión que el virus original, con niveles más comparables a los que vemos con la variante delta. Es notable que la variante de Ómicron haya evolucionado para conservar su capacidad de unirse a las células humanas a pesar de mutaciones tan extensas", agregó.
¿Y QUÉ PASA CON LOS ANTICUERPOS?
Ómicron fue menos evasivo a la inmunidad de las vacunas, "en comparación con la derivada de la infección natural en pacientes no vacunados. Esto sugiere que la vacunación sigue siendo nuestra mejor defensa contra la variante ómicron", confirmó el científico.