Uno de los ejes importantes en los esquemas de prevención es la reinserción social, pues de nada sirve detener a las personas por algún delito sí cuando son puestas en libertad vuelven a incurrir en lo mismo.
Por ello, a través de los programas de reinserción se buscan mecanismos de acciones que permitan la vinculación, reinserción y que una vez que son liberados tras una detención o encarcelamiento, puedan ser funcionales para la sociedad y sus familias, informó el director de Educación y Prevención del Delito del municipio de Tecomán, Mauricio Romero Machuca.
"que estas personas que de una manera u otra violentan la ley, están fuera de la ley, en vez de hacer cosas positivas a la sociedad es lo contrario como canalizarlas y derivarlas a las diferentes instancias que hay para que, al término de su tratamiento sean personas productivas".
En el caso de Tecomán, cuando son detenidas las personas por conductas inapropiadas, se busca a través del juzgado cívico una sanción restaurativa, cuando se trata de personas adictas a alguna droga legal o ilegal los canaliza a algún centro de tratamiento, también se busca alguna opción laboral para estas persona y se les da un acompañamiento psicológico.
"Buscamos que sea algo integral que si bien hacemos las detenciones en este caso particular en las áreas de trabajo que muy amablemente las empresas nos dan permiso de impartir los talleres, también los podemos canalizar, poderlas derivar y que reciban un tratamiento integral".
No obstante, Romero Machuca reconoció que la efectividad de las acciones de reinserción social es muy baja, pues de 100 personas canalizadas, apenas el 10 por ciento logran reinsertarse a la sociedad de forma positiva, aunque dijo, la causa es multifactorial, desde cuestiones familiares, personal, laboral, el entorno en el que se desenvuelve, entre otros.