Diputados locales prohibieron el castigo corporal, humillante o cualquier tipo de violencia en contra de niños, niñas y adolescentes aplicables para quienes ejercen la patria potestad, la tutoría, la custodia o en su caso los encargados y el personal de instituciones educativas, deportivas, religiosas, de salud, de asistencia social y de cualquier otra índole que brinde asistencia.
Lo anterior al aprobar diversas reformas a la Ley de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes y del Código Civil para el Estado de Colima.