2022 fue un año complicado para los empresarios agremiados a la Coparmex Colima, con grandes lecciones y aprendizajes, señaló el líder de sector, Eduardo Sánchez García.
Explicó que se vieron obligados a salir de los esquemas tradicionales derivado de la pandemia por Covid-19, la inflación y la ola de violencia que aqueja al estado.
"Que estos elementos trajeron que el consumo interno, las ventas en los comercios, las inversiones se retrajeran un poco y que eso al cierre del ejercicio anual sumado a la inflación nos dejara un año con grandes expectativas pero con resultados muy conservadores".
Por tanto, la expectativa para este año que apenas comienza es que se pueda consolidar la paz en el estado, pues de ser así, 2023 sería un año de buenas inversiones, números positivos en materia económica y buenos resultados en lo general.
"Lo fundamental para Coparmex ahorita es que exista un espacio que dote de certeza jurídica a los inversionistas, a los empresarios a quienes quieran apostarle por Colima y que esto sea consecuencia de la seguridad que todos deseamos.
En ese sentido, dijo que aunque han estado muy atentos para colaborar con los gobiernos en la medida de sus atribuciones para mejorar la situación de seguridad en la entidad, también han estado atentos para señalar lo que consideran que no es correcto o permisible por parte de las autoridades.