La red de personas desaparecidas en Colima, que actualmente conforman 11 familias, buscan entre las 49 fosas clandestinas de Tecomán en donde se encontraron 69 cadáveres, 16 cuerpos de familiares, señaló una integrante del colectivo, quien desde pasado 21 de agosto no sabe dónde está su hijo.
"Yo como madre y mis compañeras también teníamos esperanzas, sabemos que hay cuerpos que tienen de cinco años para acá y hay unos muy descompuestos, hay otros que a lo mejor no...salto yo tengo muchas esperanzas de encontrar a mi hijo como esté, lo quiero como esté, si está vivo mucho mejor, si está muerto pues como esté".
La mujer quien pidió no salir en las imágenes por temor represalias, narró que su hijo salió de su casa en Villa de Álvarez para ir a recoger unos lentes a la vivienda de otro amigo y nunca llegó a su destino, por eso después de buscarlo en la Fiscalía General del Estado y dar muestras de ADN se unió a esta organización estatal de familiares de desaparecidos.
Pero es hasta que aparecen las fosas de Tecomán y viene la represente de la Comisión Nacional de Víctimas, cuando se dan cuenta que no reciben la ayuda que les corresponde, como es contar con un abogado y que por ley les deben avisar cuando encuentren un terreno con muertos para que puedan asistir.
"A nosotros no nos han ayudado para nada, no nos han abierto las puertas para nada, quedaron que iban a ir a ver las casas de cada quien y no han ido, que nos esperemos que en grupo, no sé qué quieren esperar si no nos había informado de todo a lo que teníamos derecho hasta el martes que se empezó a ver todo comenzaron a querernos apaciguar".
También reprocho que en cuanto se fueron las autoridades federales, en la comisión estatal de atención a víctimas les dejaron de hablar bonito y la trabajadora social les informó que solo los atenderán en grupo, no de manera individual: Mientras que el Fiscal General se reúne con ellos una vez al mes y no les informaron de la fosa de Pueblo Juárez.