En caso de que sea aprobada la iniciativa de reforma electoral del presidente Andrés Manuel López Obrador se estaría debilitando el órgano electoral, pues la experiencia y conocimiento de los cuadros profesionales en cuanto a funcionarios electorales se estaría perdiendo, además se tendría una carencia en las evaluaciones y capacitaciones previo a las elecciones.
"El Instituto se vería obligado a hacer una convocatoria, cada tres años contratar personal, medio capacitarlos para que puedan fungir como funcionarios electorales y después de que termine la elección los vuelves a correr, entonces todo el saber de ellos se va perdiendo".
El politólogo ha referido que se percibe la falta de análisis en el balance de esta iniciativa y ese sería un problema, pues el ejecutivo y su alianza de partidos no sólo debe guiarse por cuestiones ideológicas.
"Se tendrá que consensar y acordar con elementos, es válido los análisis y diagnósticos y a partir de eso tomar una decisión, lo cual no están haciendo".