El regreso a clases presenciales resultó poco favorable para la economía de los transportistas del servicio urbano y suburbano del valle de Zamora, toda vez que algunas instituciones educativas de la conurbación determinaron retomar actividades bajo la modalidad híbrida o semi presencial, con el fin de prevenir riesgos de contagio de COVID-19 entre la población estudiantil, propiciando que la movilidad de usuarios sea casi nula. Pese a esta situación, tanto los concesionarios como los chóferes de las distintas rutas, hacen un llamado a la ciudadanía a actuar con responsabilidad y no relajar las medidas sanitarias, recordaron que el uso de cubrebocas es obligatorio en las unidades.