El asma es una de las enfermedades respiratorias más frecuentes, se presenta mayormente en edades tempranas, pero también puede afectar a jóvenes y adultos.
A pesar de ser una enfermedad que no se cura, sí puede controlarse y llevar una vida normal, señaló la presidenta del Colegio de Médicos de Colima, Dafne Goretti Delgado Machuca.
"Es importante por ejemplo, el manejo del estado emocional, porque antes lo que se hacía es que se les aislaba, que no hicieran ejercicio/ahora se les explica a los papás que los integren a las actividades grupales, que lo niños puedan hacer actividad física que vayan a natación para que refuercen lo que son sus vías respiratorias".
Desde el punto de vista de la gravedad, el adulto se clasifica en cuatro grados de menor a mayor gravedad; asma intermitente, asma persistente leve, asma persistente moderado, asma persistente grave.
Esta clasificación se basa en diferentes aspectos; frecuencia de síntomas diurnos, uso de medicación de rescate, frecuencia de síntomas nocturnos, grado de limitación de las actividades habituales, función pulmonar, frecuencia de exacerbaciones o frecuencia de asma.
Entre tanto, el asma en infantes se clasifica en cuatro grados de mayor a menor; asma episódico ocasional, asma episódico frecuente, asma persistente moderado y asma persistente grave.
"El tratamiento tiene que ser con médico porque muchas veces ha es que el niño presenta asma le voy a poner todos los remedios/que el aceite de zorrillo, muy bien el aceite de zorrillo tiene propiedades caliente si probablemente el masajito en el pecho o en la planta de los pies va a cambiar la temperatura del niño pero no nos va a quitar el asma, no nos va a quitar el asma y podemos someter al niño a que tenga más dificultad si no se le da tratamiento".
Por: Andrés Solis (@aasolisa)
José Romero Enríquez, indígena yaqui de Sonora, expone "pues aquí está el maestro, hace como unos tres, cuatro días, llegó aquí, pero no había, más que Conafe (Consejo Nacional de Fomento Educativo) había aquí, pero la escuela está lejos a San Bernardo, para los niños chiquitos".
Esta es parte de la realidad de muchas escuelas, especialmente aquellas que se encuentran en las zonas más pobres y marginadas. En las regiones indígenas del país.
La Secretaría de Educación Pública (SEP) reconoce carencias que también había documentado la Organización Mexicanos Primero, precisamente con datos de la SEP.
Rodolfo Cruz Vadillo, investigador en Educación de la Universidad Popular Autónoma del estado de Puebla, señala, "y lo otro que es muy diferente, es si todas las escuelas hoy en México pudiéramos llegar y decir, están brindando el mismo servicio y están operando con una infraestructura muy similar la una de la otra".
En todo el país hay casi 262 mil escuelas; 231 mil 534 son de educación básica, desde preescolar hasta secundaria.
Para el ciclo escolar 2023-2024, había 201 mil 508 planteles públicos y 30 mil 026 colegios privados; por cada escuela particular hay prácticamente siete planteles públicos, aunque no todas se encuentran en igualdad de condiciones.
Entre este universo de escuelas públicas de nivel básico, 75% se encuentra en zonas urbanizadas y apenas una de cada 10 escuelas de educación inicial, preescolar y primaria, son de educación indígena.
"Pero la política educativa hoy se declara inclusiva, con equidad, de excelencia, ok, no es que le estemos pidiendo cosas que no declara, si tú te declaras inclusiva, lo que tiene que haber son materiales que puedan atender la diversidad de los estudiantes y para eso no solamente nos sirve un libro de texto", señala Cruz Vadillo.
Esto significa que llevar escuelas a las comunidades es un primer paso para garantizar el derecho de niñas, niños y adolescentes a recibir educación gratuita y de calidad, como lo establece la Constitución Política, aunque en la realidad, los estados más pobres sufren por la falta de escuelas suficientes y eso se traduce en un mayor rezago educativo...
Florentino Castro López, comisionado de la Junta Directiva de la Comisión Nacional para la Mejora Continua de la Educación (MEJOREDU), establece "es muy difícil en unos cuantos años, nunca en materia educativa los resultados son de corto o mediano plazo, siempre son de largo plazo; habría que esperar el paso del tiempo, para analizar qué tan exitosas resultaron muchas de las estrategias que la autoridad educativa llevó".
En días pasados fue localizada una fosa clandestina con un cuerpo humano en la localidad El Sauz del municipio de Minatitlán.
Trascendió que fueron los habitantes de esta localidad que se ubica en los límites con Jalisco, quienes alertaron a las corporaciones de seguridad sobre lo ocurrido, quienes acudieron a la zona para realizar los trabajos que por ley corresponden.
Como en la mayoría de estos casos, las autoridades no han emitido información al respecto.
Restos humanos pertenecientes a 42 personas fueron localizados enterrados en fosas clandestinas y otros quemados en el rancho "El Guamúchil" en el municipio de Ixtlahuacán, esto de acuerdo con un reporte de la Fiscalía Especial en Investigación de los Delitos de Desaparición Forzada de la Fiscalía General de la República; la información se da a conocer luego de que Colectivos de Búsqueda de Colima exigieron a las autoridades los detalles respecto a los hallazgos derivados del cateo realizado en el periodo del 13 de enero al 28 de abril del 2024.
Más de la mitad de los restos humanos enterrados fueron perpetrados por el Cártel de Sinaloa y los quemados fueron por el Cártel Jalisco Nueva Generación, organización que actualmente tiene el control de ese territorio.
Durante estos tres meses en las 42 hectáreas de este rancho se encontró que los restos humanos cercenados estaban diseminados en todo el terreno.
El 40.47% de los restos humanos fueron sometidos a exposición térmica (fueron quemados presumiblemente con químicos pero no se ha confirmado aún); el resto correspondía a reducciones esqueléticas enterradas, que tenían una duración estimada de entre 3 a 4 años.
De los restos humanos se ha logrado identificar a 3 personas, todas de otros estados, en su mayoría de Michoacán. Además hubo 2 registros no humanos.
Los hallazgos se encuentran resguardados en el Centro Médico Forense Federal (CEMEFOFE) de la Fiscalía General de la República.Después de que fueron recuperados, los restos fueron llevados al CEMEFOFE en donde se les practicaron análisis de laboratorio. Los dictámenes de esos análisis se hicieron llegar a la FEIDDF, en donde se analizaron desde las áreas de criminalista, antropología y medicina genética para obtener un análisis forense integral.