Ricardo Olivera Guerrero se dedica a la reparación de aparatos electrónicos desde los 15 años, primero en algunas empresas de la entidad, posteriormente decidió poner su propio negocio.
"Como en el 98 entré a una empresa que se llama ofitec tecnología/ahí fue donde realmente aprendí a reparar equipo porque en ese tiempo había poco pero aunque se usaba relativamente poco la computadora, nosotros teníamos mucho trabajo".
Reconoce que, aunque lo que más le gusta es poder ayudar a sus clientes y ofrecerles un servicio de calidad, lo más complicado de su labor es el trato con la gente.
"Reparar un equipo no lo es tanto, son máquinas al final de cuentas/el problema a veces es el trato con la gente porque siempre es complicado pero hay que saber sobrellevarla y dar un buen servicio, yo creo que el éxito de cualquier empresa es el servicio que se le da a la gente".
Olivera Guerrero menciona que su trabajo le apasiona, incluso, llega de día y no se da cuenta en qué momento ya oscureció.
"He hecho grandes amigos, muchas amistades, gracias al negocio me conoce mucha gente por tanto tiempo que he estado aquí, desde hace tres años también doy clases en el TEC de Colima, así que también muchos alumnos, conozco más gente".
Señala que la tecnología avanza muy rápido, lo que le obliga a mantenerse actualizado y estar en constante aprendizaje y, aunque repara todo tiempo de aparatos electrónicos, lo que más le lleva a arreglar son celulares y computadoras.
Hoy, su mayor satisfacción es que, la mayoría de jóvenes que han trabajado en su negocio han montado su propio establecimiento gracias a los conocimientos que ahí adquirieron.