Con una fotografía de frente y perfil, así es como inicia la realización del rostro de los mojigangos una tradición única de las fiestas charrotaurinas de Villa de Álv arez, son los arquitectos Alfonso Cabrera y su esposa Claudia Morales Centeno los creadores desde hace aproximadamente 20 años.
"En base a la foto que nos mandan empezamos a hacer el boceto a lápiz en un papel, vemos las proporciones etcétera, y luego ya pasamos a modelar, esto es papel ahorita es muy ligero".
Años atrás esta encomienda estaba a cargo del maestro Alfredo Medina. Las cabezas de los mojigangos se elaboran en una estructura de acero que se moldea con más de 100 kilos de plastilina y se forra papel maché; se pasa a los colores, se pintan ahora sí lo que son ojos, nariz, boca y algunos otros rasgos.
"Tecnologías pues tradicionales, dentro de estas tecnologías entra nuestro engrudo porque el papel maché se pega con engrudo que mi esposa hace que es fabuloso, te queda como piedra y aparte es resistente".
Los mojigangos son un homenaje a personas distinguidas de Villa de Álvarez, previo a las fiestas su identidad es secreta y su develación se lleva a cabo en la primera cabalgata nocturna.
"Pero a la hora de que vemos a los mojigangos ya bailando pues es una emoción muy grande pertenecer a esta tradición".