Un oficio es una actividad más o menos especializada que se realiza de manera manual o artesanal, se elabora con materiales que están en el medio ambiente para obtener un producto que sea hecho con madera, barro cuerdas, tintes, que no tienen un proceso previo y se aprende a estructurarlos por enseñanza familiar y así se crea un oficio, explicó el historiador Abelardo Ahumada.
Precisó que hay oficios que ya no existe como el aguador, mesoneros, arriero y los cargadores, pero cambiaron y en los años 70 se formaron joyeros a mano, la gente que trabaja cuero, lecheros, costureras y sastres, estos últimos que con la llegada de tiendas departamentales han tenido que adaptarse a los tiempos para sobrevivir.
"Esos oficiante están tratando de sobrevivir ante la presencia de lo industrializado, la producción de artefacto en serie desplazó a los trabajadores trabajadores manuales y entonces es un cuento de nunca acabar va a suceder en la medida que aparezcan nuevas tecnologías, van aparecer nuevos oficios".
Precisó que en la zona rural los efectos de la industrialización se sienten con más fuerza, porque las bolsas de palma se cambiaron por plásticos igual que el barro.
"Las personas que se dedicaban hacer canastas pizcadoras y canastas para el mercado, ya prácticamente desaparecieron, los que hacían escobas de palma en Villa de Álvarez en Agua Dulce siguen haciéndolas porque hay personas que todavía las requieren, pero pasa a cualquier tienda de esas venidas de México o extranjeras y te saturan escobas de plástico y entonces la gente que utilizaba escobas con base a los productos de la región se quedan temblando porque la gente no les quiere comprar".
Sin embargo consideró que hay otras personas que buscan adaptarse a los cambios y trabajan el barro, pero ahora lo pintan y adornan con chaquira y así pasa lo mismo con otros artículos.