En 2011, durante la administración del exgobernador Mario Anguiano Moreno se anunció el Programa Estatal de Acceso y Movilidad incluyente, mismo que fue dividido en tres etapas y para el cuál se contó con un presupuesto de 29 millones de pesos.
Ese año fueron adquiridos tres autobuses y diez taxis incluyentes, mismos que al poco tiempo dejaron de funcionar.
En 2012 fueron dos autobuses y cinco taxis, pero ocurrió lo mismo. Mientras que, en 2013 se construyeron 1 mil rampas y pasacalles en Armería, Tecomán, Manzanillo, Colima y Villa de Álvarez.
En 2014, fueron colocadas 200 señales informativas de la ruta que sigue el autobús por la zona conurbada Colima-Villa de Álvarez en distintos paraderos del transporte público, para lo cual se invirtieron 700 mil pesos.
En 2015 incluyeron placas con información en braille, en el proyecto también se estimaba la construcción de más pasacalles, rampas y semáforos auditivos en los municipios que faltaban como; Cuauhtémoc, Coquimatlán, Minatitlán, Ixtlahuacán y Comala, debido a que el presupuesto les fue insuficiente.