Al afirmar que los choferes y concesionarios del transporte público de Colima y Villa de Álvarez, en la modalidad de taxis, han registrados pérdidas por más de 150 millones de pesos durante los cinco meses que lleva la contingencia por el Covid-19 en la entidad, el presidente del Frente Colimense del Transporte, Hugo Chávez Ríos, confirma que no se negará el servicio a usuarios que no usen el cubrebocas, pese a la reciente aprobación de la Ley que regula su uso en el Congreso estatal, la cual prevé sanciones a concesionarios.
"Pues ahí, creo yo que el primer término va a ser una amonestación, esperemos que los compañeros transportistas, porque si no damos el servicio, pues, nos están quitando lo poquito que tenemos para comer, verdad, entonces, pues ahí nos ponen en un dilema o comemos o no comemos, entonces el gobierno del estado pues en determinado momento si nos dijera: aquí están 10, 20, 30 mil mascarillas para el servicio público, pues nosotros le podemos dar una mascarilla de 2,3 pesos al pasaje, verdad, porque el comenzar nosotros a sacar nuestro propios y poco ingresos que tenemos al día, pues nos va a partir otra vez los ingresos que nosotros estamos percibiendo".
El líder de los taxistas avaló la aprobación de la Ley que regula el uso de Cubrebocas ante el alto índice de contagios del virus Sars-Cov2 que se tiene en Colima, sin embargo lamentó que no se consideren apoyos a los transportistas y se les deje solos, pese a que son la segunda línea que hace frente a la pandemia.
"Nos ha acompañado el secretario en las sanitizaciones; él con gusto va y nos alienta, pues, que sigamos que sigamos trabajando en la limpieza de nuestras unidades pero en realidad, este, no hemos recibido por parte del Gobierno del Estado, hasta ahorita, ningún apoyo. Creo que al principio regalaron 20 o 30 litros de gel, pero de ahí en adelante todo lo están haciendo los compañeros transportistas. Nos han apoyado, en parte, gasolineros que también se pusieron las pilas en su momento".
A decir del dirigente del Frente Colimense del Transporte que agrupa a más de mil 300 unidades de taxi de la zona conurbada de Colima y Villa de Álvarez, la pandemia del Covid-19 y la puesta en marcha de los mototaxis, han afectado drásticamente su economía por lo que espera que el gobierno estatal tenga mayor empatía hacia los transportistas y no solo busque sancionar a través de la nueva legislación.