Desde hace 35 años don Felipe recorre las calles del centro de la ciudad de Colima para ganarse su sustento diario con la venta de tejuino, fruta picada y churritos. Asegura que nunca ha dejado de trabajar y lo seguirá haciendo hasta que la vida se lo permita.
"No, yo todo el tiempo trabajo, yo nunca dejo de trabajar" / "¿Desde a qué hora empieza a prepararlo todo? Pues como a las 7, 8, de la mañana, a las 7 u 8 de la mañana, el juguito pues, los churros, las palomitas son caseras, todos son caseros".
Con 75 años de edad, Don Felipe recuerda que inició su negocio en 1987 con el apoyo de su suegra, desde entonces empujando su triciclo busca ganarse la vida entre los clientes que lo han preferido durante todos estos años.
"Empecé a hacer en tienda blanco, tienda blanco, ahí empecé a vender y ahí trabajé en blanco" / "Pues a veces te va bien a veces te va mal y es como todo, eda. Este tejuino es de maíz no es de masa, no es cualquier tejuino, anda al centro, masa con chocolate y leche es lo que les venden ahí".
Actualmente Don Felipe vive solo pues ya todos sus hijos están casados, pero todos los días recibe la visita de nietos y una de sus hijas que lo apoya a preparar todo lo que venderá en el día.
Asegura sentirse afortunado y dichoso de que nada lo ha detenido para seguir trabajando, pese a todas las adversidades.
"Pues las dos cosas compran, fruta, tejuino, limonadas, diablitos, pellizcos, chamoyadas, todo eso. ¿Y usted solito con el triciclo? Yo solo con el triciclo".