El Gobierno de Venezuela ha denunciado la recolección de fondos en el exterior para financiar "atentados" en el país, en medio de una creciente tensión política y social.
El presidente venezolano, Nicolás Maduro, comunicó al secretario general de la Organización de Naciones Unidas (ONU), António Guterres, que su Gobierno enfrenta "agresiones externas". Esto se produce después de las elecciones del 28 de julio, donde Maduro fue proclamado ganador, un resultado que ha sido cuestionado tanto a nivel nacional como internacional. En su conversación con Guterres, Maduro advirtió sobre la "contratación de mercenarios para invadir el país e intentos de magnicidios", así como sobre campañas en redes sociales que promueven la recolección de fondos para realizar atentados contra la institucionalidad del país.
La campaña "Ya Casi Venezuela", lanzada el 16 de septiembre, ha captado atención por su enfoque en la recaudación de fondos a través de moneda convencional y criptomonedas. Según su sitio web, las donaciones se destinarán a "iniciativas clave que buscan devolver la libertad y el futuro" al país. Sin embargo, esta iniciativa ha sido criticada por el Gobierno venezolano, que la califica como un esfuerzo mercenario orquestado por Prince.
Esta situación se ha intensificado tras la aparición de una campaña impulsada por el empresario militar estadounidense Erik Prince, quien busca reunir 10 millones de dólares para lo que él llama "restaurar la democracia" en la nación suramericana.
El ministro de Defensa, Vladimir Padrino López, se refirió directamente a esta recaudación, afirmando que Prince está amenazando abiertamente con acciones contra Venezuela. En un video compartido en Instagram, Padrino enfatizó que el país no está desarmado y que cualquier intento de agresión será respondido con fuerza por la Fuerza Armada Nacional Bolivariana (FANB).
Erik Prince es conocido como el fundador de Blackwater, una empresa privada militar implicada en controversias por crímenes de guerra en Irak y Afganistán. Su reciente involucramiento en Venezuela ha suscitado dudas sobre sus verdaderas intenciones y la naturaleza de su campaña. En sus publicaciones en redes sociales, Prince ha instado a "votar con dólares", aunque no ha proporcionado detalles claros sobre cómo planea implementar su estrategia para "restaurar la democracia" en Venezuela.
La campaña ha recaudado más de un millón de dólares en los primeros días desde su lanzamiento. Sin embargo, hay escepticismo sobre el destino final de estos fondos y si realmente contribuirán a un cambio político o si se desviarán hacia otros fines menos transparentes.
La página web de "Ya Casi Venezuela" promete claridad sobre el uso del dinero recaudado, pero las experiencias pasadas con iniciativas similares han dejado un sabor amargo. Por ejemplo, la "ayuda humanitaria" en 2019 fue objeto de un escándalo por corrupción durante el interinato fallido de Juan Guaidó.
Además, hay preocupaciones sobre las implicaciones legales y éticas relacionadas con la recolección de fondos para actividades potencialmente violentas. La idea de financiar una operación militar o mercenaria plantea serias cuestiones sobre la soberanía nacional y los derechos humanos en Venezuela.