Colectivos de madres buscadoras y familiares de personas desaparecidas en Culiacán se manifestaron la mañana del 15 de octubre en la capital sinaloense, con el fin de visibilizar la desaparición forzada, que desde el 9 de septiembre ha aumentado considerablemente.
Poco después de las 9:00 de la mañana, un contingente de alrededor de 20 personas partió desde las escalinatas de la parroquia de Nuestra Señora de Guadalupe (La Lomita) hacia la catedral. Vestidos de blanco, con fichas de búsqueda de sus desaparecidos y cartulinas en mano, marcharon al grito de "¡Ahora, se hace indispensable, presentación con vida y castigo a los culpables!" y "Al desaparecido no se le juzga, se le busca".
El recorrido, que abarcó toda la avenida Álvaro Obregón hasta llegar a la plazuela del mismo nombre en el centro de la ciudad, se realizó sin la presencia de seguridad oficial al inicio; las autoridades llegaron casi al final del trayecto. Un vehículo de la Comisión Estatal de Víctimas fue el encargado de abrir paso por la vialidad de un solo sentido, guiando al tráfico para evitar embotellamientos y brindar seguridad a los manifestantes.
Finalmente, una vez concluida la marcha, los participantes se concentraron en la plazuela, donde pidieron a las autoridades mejorar la estrategia de seguridad y evitar más privaciones de la libertad y asesinatos.