El proyecto de presupuesto que se presentó por Presidencia de la República tiene un contraste para la economía de Sinaloa.
Por un lado, se etiquetaron 4 mil 574 millones 822 mil 079 pesos para obras públicas, por el otro se establecen recortes a la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural y a la Comisión Nacional de Pesca, que afectarán a los esquemas de comercialización.
Para obras públicas se incluyó la continuación de los proyectos hidráulicos como la Presa Santa María y el sistema hidroagrícola de la Presa Picachos, así como fondos para las carreteras Badiraguato - Parral y Tayoltita San Ignacio.
Además están otros proyectos portuarios, carreteros, hospitalarios y el inicio del cambio de la infraestructura ferroviaria de Culiacán para que sea periférica, y al mismo tiempo aclara que en este paquete económico no se etiquetó recursos para el transporte tipo BRT, conocido como Metrobús, para Culiacán.
Sin embargo, la propuesta de Presupuesto 2020 deja en incertidumbre al sector primario, que tiene la mayor fuerza de empleo en el Estado, pues la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural sufrió un recorte sustancial.
Para el próximo año se prevé una asignación del 29.3 por ciento, quedando en 19 mil 181 millones de pesos, afectando, principalmente, la agricultura comercial.
Manuel Tarriba Urtuzuástegui, Secretario de Agricultura y Ganadería en Sinaloa, dijo que para este año se prevé que se cierre con una derrama de 23 mil millones de pesos, pero que esos números podrían decrecer por la falta de apoyos a la agricultura.
"Esto es un tema de economía de Estado, es un tema de los agricultores, es un tema que si no existen los apoyos o no estamos con la certidumbre para las siembras la tendencia va a ser que se disminuya la siembra", dijo.
Para el ciclo agrícola Otoño-Invierno 2019-2020 se estableció la necesidad de hacer una reconversión agrícola, para que se dejara de producir maíz blanco, del cual se ha declarado en sobreproducción.
La propuesta federal es que se modifique el esquema de siembra y se produzca maíz amarillo, pero los productores del Estado condicionaron esa reconversión, exigiendo apoyos, los cuales no se valoran a corto plazo, según señaló Jaime Montes Salas, coordinador general de Programas Sociales Federales en Sinaloa.
"En Sinaloa no necesita dádivas ningún agricultor, necesita certezas y eso es lo que le vamos a dar", dijo.
"Esto no es de la noche a la mañana, lógicamente, porque estábamos impuestos a vivir de subsidios y de dádivas y eso y a largo plazo a ningún pueblo, a ningún país le conviene, necesitamos ir a los puntos donde está dificultando que sea rentable la actividad agrícola, que es la semilla, el fertilizante, las técnicas agrícolas, los insumos y el costo financiero. Todo eso lo iremos analizando, lo vamos a ir eficientando? no es de días, ni es de meses, es un proceso"