Una persona fue detenida en las inmediaciones del campo de golf donde estaba jugando el expresidente estadounidense Donald Trump mientras portaba un arma larga, un rifle AK47, y tenía la intención de atacar al candidato republicano.
Según medios como CNN, el Servicio Secreto disparó contra el sospechoso y tras el suceso se recuperó un arma larga. Las autoridades creen que el individuo tenía la intención de atacar al exmandatario, quien se encuentra a salvo.
En un comunicado el propio Trump destaca "Hubo disparos cerca de mí, pero antes de que los rumores comiencen a salirse de control, quiero que escuches esto primero: ¡ESTOY A SALVO Y BIEN!".
El candidato republicano a la presidencia estadounidense, quien el pasado 13 de julio sufrió un intento de asesinato, añadió: " ".
El Servicio Secreto informará este domingo en una conferencia de prensa de los detalles de lo sucedido, ya que todavía no ha sido confirmado de manera oficial qué ha sucedido exactamente.
Lo poco que se sabe es que minutos después de las 14.00 de la tarde (18.00 GMT) la campaña de Trump anunció que el exmandatario está "a salvo" luego de que se registraron disparos cerca de su club de golf en Palm Beach, Florida.
"El presidente Trump se encuentra a salvo tras los disparos que se produjeron en sus inmediaciones. No hay más detalles por el momento", apuntó en un escueto texto distribuido a la prensa Steven Cheung, director de comunicaciones de la campaña.
El suceso se produjo cerca de su club de golf en West Palm Beach, Florida, donde el expresidente se encontraba jugando ese deporte y se espera que se ofrezcan nuevos detalles sobre lo sucedido.
De acuerdo con la cadena NBC News, Trump fue inmediatamente trasladado a un lugar seguro cuando se escucharon los disparos.
En un comunicado, la Casa Blanca señaló que el presidente de EE.UU., Joe Biden, y la vicepresidenta y candidata demócrata, Kamala Harris, fueron informados "sobre el incidente de seguridad, y están aliviados de saber que está a salvo. Su equipo los mantendrá informados periódicamente".
El Servicio Secreto envió un comunicado en el que apuntó que está investigando lo sucedido en colaboración con la Oficina del Sheriff del Condado de Palm Beach.
Trump fue víctima de un intento de asesinato el pasado 13 de julio durante un mitin en Butler (Pensilvania), después de que un joven de 20 años le disparó con un fusil hiriéndole en la oreja derecha.
El Servicio Secreto abatió al agresor, quien disparó desde un lugar elevado fuera del recinto, donde una persona del público murió por herida de bala.
El suceso provocó numerosas dimisiones por las fallas de seguridad del evento, incluso la de la entonces directora del Servicio Secreto estadounidense, Kimberly Cheatle.
Cheatle acabó dimitiendo diez días después por los errores en la seguridad en ese encuentro y afirmó que ese intento de asesinato supuso el "mayor fallo operativo" de la agencia "en décadas".
Tras esto, el Servicio Secreto aprobó un plan para incrementar la seguridad de Trump, que incluye el uso de pantallas de vidrio blindado en los eventos que se lleven a cabo en exteriores