Desde hace años, han sido miles de familias desplazadas por la violencia que se han visto obligadas a dejar sus patrimonios debido a las amenazas del crimen organizado quienes se pelean por el control de los territorios tanto para la producción de enervantes, como para la explotación de las minas.
Éste problema, se sigue presentando en Sinaloa, pues los grupos criminales siguen obligando a las personas de las zonas altas de la sierra a dejar sus tierras sin importarles que se queden en la calle y pierdan lo poco que tenían conseguido para vivir dignamente.
A pesar de que no se tienen porcentajes de cuanto ha sido el crecimiento de este fenómeno social en la entidad, aún se siguen sumando más familias, pues de acuerdo a cifras del Movimiento Amplio Social Sinaloense, en el sur del estado, son 2 mil 500 familias que han sido desplazadas por la violencia.
Miguel Ángel Gutiérrez Sánchez, representante del Movimiento Amplio Social Sinaloense (MAS), señaló que en el estado, solamente hay censadas 2 mil 500 familias, sin embargo, las cifras que ellos manejan, indican que son más de 5 mil familias que buscan vivir con dignidad.
El representante del movimiento, manifestó que si bien ya existen algunas leyes estatales para prevenir el desplazamiento interno como son en los estados de Chihuahua, Chiapas y Sinaloa, todavía hace falta que se tenga una ley general que atienda ésta problemática y que permita acceder a los recursos federales.
Asimismo, aseveró que en el estado, se necesita mayor control de la delincuencia organizada, por lo que dijo, hace falta cambiar la estrategia en materia de seguridad, pues cada día las familias que son desplazadas viven más violencia.
Durante la visita de AMLO, el representante del Movimiento Amplio Social Sinaloense, buscó un acercamiento con el Presidente de la República para pedirle que bajen programas de vivienda, porque se necesitan alrededor de 3 mil casas mínimo para albergar a estas familias.