Integrantes del grupo "Tesoros Perdidos" y de la Comisión Nacional de Búsqueda, localizaron una osamenta a un costado de donde se está construyendo la Universidad de Durango nueva, en las cercanías del nuevo hospital general.
Tras encontrar pruebas a un metro y medio de profundidad durante el trabajo de mapeo, los integrantes de Tesoros Perdidos solicitaron el apoyo de la Vicefiscalía y la protección de la Sedena.
Se dijo que el mes pasado también por esa zona enmontada al norte de la ciudad fueron localizados los restos de dos personas dentro de una laguna sumando ya tres las osamentas.