Carmen Nava, de 64 años, se enfrenta a una difícil situación familiar y económica en su hogar, donde viven sus cuatro hijos junto con sus respectivas familias. Esta convivencia, aunque solidaria, incrementa la carga de los gastos diarios. A pesar de que cada padre trabaja, la crisis económica actual dificulta cubrir las necesidades básicas, como la alimentación. Muchos días, la familia se ve obligada a priorizar gastos, lo que afecta su bienestar.
Sin embargo, el problema más urgente radica en la salud de la madre de Carmen, Apolonia, que tiene 77 años y padece Parkinson avanzado. Esta enfermedad ha deteriorado significativamente su movilidad y capacidad de comunicación. Al residir en una zona rural de la sierra, la madre de Carmen no tiene acceso a atención médica adecuada. Debido a esta limitación, debe viajar a la ciudad cada tres meses para recibir tratamiento, lo que representa un gasto considerable. Cada consulta médica le cuesta aproximadamente 900 pesos, a lo que se suman los costos de los medicamentos necesarios para su tratamiento, creando una carga económica.
La situación se torna más crítica al considerar que la movilidad de la madre de Carmen sigue deteriorándose. La familia solicita apoyo, especialmente en la obtención de una silla de ruedas, que se vuelve fundamental para mejorar su calidad de vida y facilitar su movilidad. Sin este recurso, su día a día se hace aún más complicado, y los desafíos físicos se traducen en un mayor sufrimiento.
En busca de ayuda, la familia Nava apela a la solidaridad de la comunidad. Aquellos interesados en colaborar pueden comunicarse al número 6181549067. Cualquier contribución puede marcar una diferencia significativa en la vida de esta familia, que enfrenta no solo una crisis económica, sino también un desafío considerable en el cuidado de la salud de su madre.