El gobierno municipal ha comenzado a tomar medidas contra los vehículos con vidrios polarizados como parte de una estrategia de seguridad. Según el alcalde Antonio Ochoa, esta acción se establece por ley y no tiene fines recaudatorios ni pretende ser invasiva. El alcalde también aseguró que las medidas serán aplicadas de manera equitativa para todos.
Sin embargo, mientras las autoridades centran su atención en el tema del polarizado, el índice de muertes por accidentes viales sigue en aumento. Factores como el exceso de velocidad y el consumo de alcohol están detrás de muchos de estos incidentes, lo que refleja una grave falta de cultura vial en la ciudad. A pesar de la urgencia, el nuevo reglamento de tránsito, que podría ayudar a mejorar esta situación, aún no ha sido implementado.
La falta de un marco normativo actualizado y una cultura de respeto a las normas viales está costando vidas. Aunque las acciones sobre el polarizado se presentan como una medida de seguridad, la realidad es que otros problemas más graves, como la conducción bajo los efectos del alcohol y la velocidad excesiva, requieren una atención prioritaria. La implementación del nuevo reglamento vial es crucial para generar un cambio real en la seguridad de las calles, pero su retraso sigue dejando vulnerables.
La seguridad vial va más allá de las políticas puntuales; es necesario un enfoque integral que aborde las principales causas de los accidentes para reducir el número de muertes en la capital.