Cada vez mas comunes los atropellamientos

En las últimas semanas, la capital ha sido testigo de un preocupante aumento en los incidentes de lesiones y muertes por atropellamiento. Estos trágicos sucesos han tenido lugar en diversas zonas de la ciudad, incluyendo calles emblemáticas como Juárez y Pinosuárez, así como en importantes bulevares como Francisco Villa y Domingo Arrieta. Es alarmante observar que en la mayoría de estos incidentes están involucrados los autobuses del transporte público.

Es importante señalar que, lamentablemente, los duranguenses no hemos adoptado adecuadamente el uso de los puentes peatonales o el respeto por los cruces de esquina. Con demasiada frecuencia, optamos por atravesar las calles directamente, ignorando los riesgos que esto conlleva y poniendo en peligro nuestras vidas y las de los demás.

La falta de observancia de las normas de seguridad vial y la imprudencia al cruzar las vías públicas son factores que contribuyen significativamente a la incidencia de accidentes. El no hacer uso correcto de los puentes peatonales y los cruces designados aumenta exponencialmente el riesgo de colisiones y atropellamientos, especialmente en áreas de alto tráfico vehicular como las mencionadas.

Es fundamental que como comunidad asumamos la responsabilidad de promover una cultura vial más segura y respetuosa. Esto implica no solo cumplir con las normativas de tránsito, sino también educar y concientizar a la población sobre la importancia de respetar las señales viales y utilizar los cruces peatonales de manera adecuada.

Las autoridades locales también tienen un papel crucial en este proceso. Es necesario implementar medidas efectivas de seguridad vial, mejorar la infraestructura de las vías públicas y aumentar la vigilancia en áreas de alto riesgo. Asimismo, se deben llevar a cabo campañas de educación y sensibilización que fomenten hábitos seguros de desplazamiento peatonal y vehicular.

En última instancia, la seguridad en las calles es responsabilidad de todos. Debemos trabajar juntos como sociedad para prevenir accidentes y proteger la vida y la integridad de quienes comparten nuestros espacios públicos. Adoptar prácticas seguras de movilidad urbana es esencial para construir una ciudad más segura y habitable para todos sus habitantes.