Antonio Bracho, director de Seguridad Pública informó que la dependencia ha adquirido un total de 100 cámaras corporales de solapa, como herramienta para combatir la corrupción y tráfico de influencias.
El director indicó que estas cámaras podrán guardar todas las actuaciones policiales, lo que proporcionará pruebas al departamento de asuntos internos, donde se podrá verificar el dicho del ciudadano o elemento policial denunciando un acto de corrupción.
Los ciudadanos que sean captados en cámara incitando algún acto de soborno, serán sancionados con una multa de $800 o $1350 si se consolida dicho acto; en caso de que el denunciado sea el elemento de la corporación, será castigado con una suspensión o incluso podría ser dado de baja.