Durante la temporada vacacional, es frecuente que numerosas personas opten por viajar en autobús y con el propósito de ofrecer un servicio mejorado a los ciudadanos, las autoridades estatales han implementado un programa de remodelación en la central camionera de la capital. No obstante, tanto los habitantes de Durango como los turistas han manifestado que estas obras están generando múltiples inconvenientes.
Las obras en curso han provocado que las personas deban aguardar más tiempo del habitual, experimentando dificultades al abordar los autobuses, tropezones y la necesidad de rodear una gran parte de la terminal. Algunas personas argumentan que esta remodelación no era necesaria, dado que la central de autobuses funcionaba correctamente anteriormente. Es importante resaltar que estos autobuses también son utilizados por personas de otros municipios que viajan a la capital por motivos médicos, lo cual significa que estas obras también los están afectando de manera significativa.
Durante este periodo vacacional, la terminal de autobuses es un lugar de tránsito fundamental para los viajeros, y los contratiempos ocasionados por las obras están generando molestias y complicaciones en su experiencia de viaje. Los retrasos y las dificultades en el acceso a los autobuses están afectando tanto a los ciudadanos locales como a los turistas que visitan Durango en busca de un merecido descanso.
Es comprensible que las autoridades estatales busquen mejorar las instalaciones y servicios de la central camionera, con el objetivo de brindar un entorno más cómodo y eficiente para los usuarios. Sin embargo, es importante que se tomen las medidas necesarias para minimizar las interrupciones y los inconvenientes causados por las obras en curso. Una planificación adecuada, la señalización clara de las rutas alternativas y la comunicación transparente con los viajeros pueden contribuir a aliviar las molestias generadas por esta remodelación