Alertan a los padres de familia ante el reclutamiento de adolescentes por crimen organizado en Durango, los jóvenes son llevados al estado de Zacatecas, bajo la promesa de buenos salarios y condiciones de trabajo. El llamado lo hace la directora del CERTMI, Lic Gabriela Avelar, quienes afirma se viene un incremento de población en el centro por la llegada de por lo menos 27 jóvenes que serán trasladados del CIAIJ del vecino estado a Durango de donde son originarios.
"Es un fenómeno social de que allá en Zacatecas hay un gran número de jóvenes adolescentes mujeres y hombres que están internados que muchos son de aquí de Durango".
La directora describe que las jovencitas son llevadas con engaños, las enamoran, les prometen que se van a casar con ellas, pero además las utilizan para hacer las labores de cocinarles y cuidar a las personas secuestradas, mientras que los jóvenes varones de los llevan con una promesa de trabajo en zacatecas bien pagado y la realidad es, que no les pagan, los tienen viviendo en campamentos improvisado, secuestrando y ciudadano a la víctimas, sin ningún servicio y además amenazados.
" El llamado es para los padres de familia que tengan mucho cuidado en cuanto a que empiecen a invitar a sus hijos para que vayan a Zacatecas y que van a tener un muy buen trabajo bien pagado".
Debido a esta situación, ya tienen a tres jovencitas en el centro que las trasladaron desde Zacatecas por los mismos delitos portación de arma y por participar cuidando a las víctimas secuestradas. La directora asegura que pueden ser más pues en ese estado vecino el centro que atiende a los jovencitos tiene una sobrepoblación de más de 250 jóvenes, algo que está por encima de lo que se tiene en Durango con apenas 17 internos más los que llegarán en estos días.
La situación es alarmante pues aquí el CERTMI cuenta con un personal capacitado y calificado para este trabajo, siempre será un reto cuando aumenta de repente la población.
Además del llamado que hace la Directora a los padres de familia, comenta las situación en la que viven su sentencia en centro del vecino Estado, y que las condiciones son muy diferentes, no cuentan con las recomendaciones por las que se rigen a nivel nacional para ayudar a los jóvenes en un proceso de integración, pues los mismos jóvenes al pedir el cambio a Durango, narran que no tienen la ayuda que el CERTMI les da aqui, para lograr corregir su camino y superar lo que han vivido.