Denuncian robos constantes en la Col. Asentamientos Humanos
Los habitantes de la Colonia Asentamiento Humanos llevan años enfrentando un grave problema de inseguridad: el robo a casa habitación. Este flagelo ha afectado a decenas de familias en la zona, quienes diariamente deben vivir con el temor de ser víctimas de delincuentes. Los vecinos comentan que la presencia constante de personas bajo el efecto de sustancias en las calles ha intensificado la situación, ya que muchas de ellas actúan de manera agresiva y amedrentan a los residentes.
A pesar de que en la colonia se encuentra una Dirección de Seguridad Pública, los robos no han disminuido. Los patrullajes son insuficientes, y los ciudadanos aseguran que la presencia policial no ha logrado garantizar la tranquilidad en la zona. Los habitantes han recurrido en múltiples ocasiones a las autoridades para denunciar estos actos delictivos, pero las respuestas han sido tardías e ineficaces.
La falta de acción efectiva ha dejado a los residentes en una situación de vulnerabilidad constante. Las casas son blanco fácil para los delincuentes, que ingresan en cualquier momento del día o la noche. Los vecinos señalan que los robos no solo se limitan a hurtos menores, sino que han llegado a registrar casos de violencia, donde los delincuentes amedrentan a las familias, robando no solo bienes materiales, sino también la tranquilidad.
Muchos de los afectados comentan que la falta de patrullaje en las horas más críticas, especialmente durante la noche, facilita la impunidad de los delincuentes. La ausencia de vigilancia constante ha permitido que los asaltos se vuelvan cada vez más frecuentes, dejando a los residentes en una constante zozobra. Los residentes ahora viven con el temor de ser víctimas en cualquier momento, mientras que la incertidumbre sobre cuándo ocurrirá el siguiente robo los mantiene en alerta.
Los habitantes de la colonia han solicitado con urgencia que las autoridades tomen medidas más concretas para frenar esta ola delictiva. Necesitan más patrullajes efectivos, rondines en las horas clave y mayor presencia policial para garantizar la seguridad de sus hogares. Sin estas acciones, la inseguridad seguirá afectando gravemente su calidad de vida, dejándolos expuestos a nuevos robos.
La comunidad clama por soluciones inmediatas que les permitan recuperar la calma y la seguridad en su entorno. Mientras tanto, los residentes continúan viviendo en la incertidumbre, con el constante miedo a que el próximo robo los deje sin lo poco que tienen.
