En respuesta a la reciente prohibición federal de vender comida chatarra en las escuelas, las autoridades municipales han intensificado la supervisión de vendedores ambulantes en las inmediaciones de los planteles educativos. El objetivo es garantizar el cumplimiento de la normativa y fomentar hábitos alimenticios saludables entre los estudiantes.
Ubaldo Salazar, director de Inspección Municipal, informó que se están llevando a cabo operativos para identificar y regular a los comerciantes que operan sin los permisos correspondientes. En casos recientes, se ha procedido al retiro de dos vendedores que ofrecían productos no permitidos fuera de las escuelas. Actualmente, alrededor de 70 comerciantes cuentan con autorización para vender en estas áreas, pero se ha detectado la presencia de otros que operan sin permiso y deben ser retirados.
Además de la regulación de permisos, se está exhortando a los comerciantes con autorizaciones vigentes a modificar su oferta de productos, sustituyendo la comida chatarra por opciones más saludables. Esta iniciativa busca alinearse con el programa federal "Vida Saludable", que entró en vigor el pasado 31 de marzo, y que tiene como finalidad eliminar la venta de alimentos ultraprocesados dentro y fuera de las escuelas.
La Comisión para la Protección contra Riesgos Sanitarios del Estado de Durango (Coprised) será la encargada de verificar el cumplimiento de esta normativa en los planteles educativos. Las sanciones por incumplimiento pueden alcanzar multas de hasta 248,000 pesos para aquellos que continúen vendiendo comida chatarra en las escuelas.
Estas acciones forman parte de un esfuerzo conjunto entre los gobiernos federal y municipal para combatir los altos índices de obesidad infantil en México. Según datos recientes, se estima que para 2035, el 56% de la niñez mexicana podría sufrir de sobrepeso, lo que representa un desafío significativo para el sistema de salud del país.
Las autoridades hacen un llamado a la comunidad educativa, padres de familia y comerciantes a colaborar en la implementación de estas medidas, con el fin de promover entornos escolares más saludables y contribuir al bienestar de los estudiantes duranguenses.