Enfrenta una dura realidad en la actualidad. Aurelia Juárez, de 76 años, reside sola en su hogar, y sus tres hijas, que viven en Estados Unidos, no le brindan apoyo económico. La situación se ha vuelto crítica para Aurelia, quien depende de una pensión de bienestar y limosnas para subsistir. Sin embargo, estos ingresos no son suficientes para cubrir sus necesidades básicas, especialmente los medicamentos que requiere debido a sus problemas de salud.
Aurelia padece diabetes e hipertensión, y hace un año se le detectó un coágulo en uno de sus pulmones, los medicamentos necesarios para tratar estas condiciones tienen un costo mensual que oscila entre mil y mil quinientos pesos, una suma que resulta inalcanzable para ella. Esta situación se agrava dado que su pensión y las limosnas que recibe no cubren ni siquiera los gastos más básicos, mucho menos los costos elevados de sus tratamientos médicos.
Hace dos años, dejó de trabajar debido a su edad y deterioro físico, durante más de 40 años, laboró en la limpieza de hogares, pero la edad avanzada y sus enfermedades la obligaron a retirarse. La detección del coágulo en sus pulmones fue un golpe adicional para su salud y bienestar, se dio cuenta de su condición cuando empezó a sentirse mal, y tras ser atendida en el centro de salud, se le diagnosticó el problema pulmonar.
Aparte de las dificultades económicas, el hogar de Aurelia también muestra signos de deterioro. Las lluvias han provocado goteras y humedad en la vivienda, añadiendo una carga más a su ya complicada situación. En vista de estas circunstancias, Aurelia hace un llamado a las autoridades y a los ciudadanos de buen corazón para que le brinden apoyo con despensa, comida o una ayuda económica que le permita cubrir sus necesidades básicas y los costos de sus medicamentos.