Detenidos por robo DMSP.

Jonathan Eduardo "N", un hombre de 36 años, fue arrestado por oficiales de la Dirección Municipal de Seguridad Pública (DMSP) tras recibir un reporte a través de la radio del Centro de Control, Comando, Comunicaciones y Cómputo (C5). Se le acusa de haber robado un rin, una estructura metálica, de una bodega situada en una propiedad rural a lo largo de la Carretera Libre a Mazatlán. El arresto se realizó después de que los oficiales acudieran al lugar de los hechos y confirmaran la veracidad de la denuncia. Posteriormente, Jonathan fue trasladado a la Estación Oriente, donde fue presentado ante el Ministerio Público para que se inicie el proceso legal correspondiente por el presunto delito de robo.

Por otro lado, una pareja compuesta por José Manuel "N", de 29 años, y Kenia Andrea "N", de 30, fue detenida por la Policía Municipal en el fraccionamiento Nuevo Valle de Durango, acusada de un robo similar. Los agentes los arrestaron en las calles Manzanos y Girasol después de que se reportara que habían sustraído un enfriador de aire de una vivienda. Esta acción se llevó a cabo después de un seguimiento de las pistas proporcionadas por el propietario de la casa. Al igual que Jonathan, la pareja fue trasladada a la Estación Oriente y puesta a disposición de la Fiscalía General del Estado para que se realicen los trámites legales pertinentes. Este tipo de intervenciones es vital para garantizar la seguridad en la comunidad y responder de manera efectiva a las denuncias de robo.

Adicionalmente, Aldo, un hombre de 35 años, fue detenido por alterar el orden público en un incidente que tuvo lugar en la calle Flor de Sauco, entre Flor de Llamarada y Flor de Durazno, en el fraccionamiento Bugambilias. Aldo fue arrestado tras obstaculizar la correcta prestación de los servicios y dirigir insultos hacia los oficiales que respondieron a la situación. Al momento de su ingreso a la estación, los oficiales notaron un enrojecimiento en la parte anterior de su cuello, aunque el diagnóstico médico posterior determinó que su estado era normal. Este caso resalta la importancia de mantener el orden público y el respeto hacia las autoridades, así como la necesidad de abordar los problemas de conducta de manera adecuada.

Estos tres incidentes reflejan la labor constante de las autoridades para combatir la delincuencia en Durango y mantener la seguridad de los ciudadanos. Cada arresto es un paso más hacia una comunidad más segura, donde los robos y alteraciones del orden público sean atendidos de manera efectiva. La colaboración entre los ciudadanos y las fuerzas del orden es esencial para lograr un entorno más seguro para todos.