Durango enfrenta sequía extrema

Durango continúa atravesando una sequía extrema que afecta a 34 de sus municipios. Según el climatólogo de la Comisión Nacional del Agua (CONAGUA), Víctor Randeles, el 84.7% del estado se encuentra bajo condiciones de sequía, una situación que ha persistido durante varios años y que se acentúa en los meses de marzo y abril, donde las precipitaciones son prácticamente nulas.

El especialista indicó que, comparado con años anteriores, el patrón climático actual sigue siendo similar, con pocas lluvias y altas temperaturas. Esta escasez de precipitaciones ha afectado significativamente los niveles de agua en presas y otros cuerpos de agua en la entidad, poniendo en riesgo tanto a las comunidades como a los sectores productivos que dependen del agua, como la agricultura y la ganadería.

Randeles mencionó que es hasta los meses de mayo y junio cuando se prevé que las precipitaciones comiencen a mejorar la situación, aunque, en este momento, Durango se enfrenta a uno de sus períodos más secos en años recientes. Este contexto complicado ha generado una creciente preocupación entre las autoridades y los ciudadanos, quienes enfrentan la falta de agua para el consumo, la agricultura y la ganadería, lo que afecta directamente a la economía local.

La sequía no solo está limitando el acceso a agua potable, sino que también está teniendo un impacto en la producción agrícola y ganadera, afectando el abastecimiento de alimentos y el sustento de muchas familias. Además, las altas temperaturas en la región están agravando la crisis.

Las autoridades estatales y federales han intensificado el monitoreo y la atención a la situación, pero Randeles señaló que, a pesar de los esfuerzos, la sequía sigue siendo un desafío crucial para Durango. Los próximos meses serán determinantes para conocer la evolución de la crisis y las medidas que se tomarán para mitigar los efectos de la falta de agua.