El aumento en el precio de casas es inevitable: AMPI

Ignacio Tabares, el nuevo presidente de la Asociación Mexicana de Profesionales Inmobiliarios (AMPI) en Durango, ha expresado su preocupación acerca del notable aumento en el costo de los inmuebles, lo que está impactando negativamente en la capacidad de adquisición de los mismos. Según sus declaraciones, el incremento en los precios está afectando especialmente la compra de viviendas, ya que en la actualidad, el costo promedio de una casa habitación modesta, compuesta por una habitación, baño, sala-comedor y cocina, ronda los 600 mil pesos en áreas no próximas al centro de la ciudad. Por otro lado, un inmueble sencillo calificado como residencial tiene un valor cercano a 1 millón 200 mil pesos.

A pesar de estos aumentos, Tabares enfatiza que Durango continúa siendo una zona con precios relativamente accesibles en comparación con otras ciudades, como Mazatlán. En esta última localidad, por ejemplo, el precio de un departamento modesto ubicado en un piso 20 asciende a un mínimo de 1 millón 200 mil pesos.

El análisis de Tabares refleja una tendencia preocupante en el mercado inmobiliario local, donde los precios están experimentando un alza significativa en los últimos tiempos. Este fenómeno no solo dificulta la capacidad de compra de las personas que desean adquirir una vivienda, sino que también puede tener repercusiones en la estabilidad económica y social de la región.

El aumento en el costo de los inmuebles puede estar influenciado por diversos factores, como la demanda creciente de vivienda, la escasez de terrenos disponibles para desarrollo urbano y el incremento en los costos de construcción y materiales. Además, la especulación inmobiliaria y la inflación también pueden jugar un papel importante en esta tendencia al alza.

Ante esta situación, es fundamental que tanto las autoridades gubernamentales como los actores del sector inmobiliario trabajen en conjunto para buscar soluciones que permitan mitigar el impacto del aumento de precios en la población. Esto podría incluir políticas de vivienda accesible, incentivos para el desarrollo urbano planificado y regulaciones que promuevan la transparencia y la equidad en el mercado.