La consulta de atención psicológica muestra una discrepancia significativa entre el número de mujeres y hombres que la frecuentan, según ha destacado la directora del hospital de salud mental, Carolina Herrera. A pesar de que las estadísticas revelan que las autolesiones son más frecuentes en hombres, la proporción de mujeres que buscan ayuda psicológica es considerablemente mayor que la de los hombres.
Carolina Herrera subrayó que, si bien las autolesiones afectan en mayor medida a los hombres, el número de mujeres que acuden a consulta es menor en comparación. Esta disparidad plantea un importante desafío en el ámbito de la salud mental, ya que sugiere que los hombres podrían estar subrepresentados en los servicios de atención psicológica a pesar de enfrentar problemas similares.
La directora del hospital de salud mental hizo hincapié en la importancia de que los hombres busquen ayuda y se sometan a tratamiento psicológico cuando sea necesario. Sin embargo, reconoció que muchos hombres se muestran renuentes a buscar atención psicológica debido a las presiones sociales y los estigmas asociados con la salud mental masculina.
La reticencia de los hombres a buscar ayuda psicológica puede atribuirse a diversos factores, incluidas las expectativas de género arraigadas en la sociedad, que suelen estigmatizar la expresión emocional y la vulnerabilidad en los hombres. Existe una percepción cultural de que los hombres deben ser fuertes, independientes y capaces de resolver sus problemas por sí mismos, lo que puede dificultar que busquen ayuda cuando la necesitan.
Carolina Herrera enfatizó que es fundamental desafiar y cambiar estas normas culturales y sociales para fomentar un entorno en el que los hombres se sientan cómodos buscando apoyo psicológico sin temor al estigma o al juicio. Es crucial promover la idea de que la salud mental es tan importante como la salud física y que buscar ayuda profesional no es un signo de debilidad, sino de fortaleza y autocuidado.
Además, es fundamental que los servicios de salud mental estén adaptados para abordar las necesidades específicas de los hombres y proporcionar un entorno seguro y acogedor donde puedan sentirse comprendidos y apoyados.