Héctor y su familia atraviesan una crisis económica severa. Albañil, pintor, plomero y hasta cocinero, hace lo que puede para llevar algo de dinero a casa. Sin embargo, el trabajo estable le es esquivo, lo que ha generado un profundo desgaste para él y su familia, que está formada por siete miembros: su esposa María, sus cuatro hijas y su nuero. Juntos luchan para sobrevivir, pero las condiciones son cada vez más difíciles.
Viven en la colonia Clara Córdova, una de las más olvidadas y marginadas. En este lugar, las carencias son evidentes. No hay drenaje, ni alumbrado público, y los servicios más básicos son inestables. A pesar de haber vivido allí durante cuatro años, la familia no ha recibido el apoyo necesario para mejorar sus condiciones de vida. Las promesas de ayuda durante las campañas electorales se desvanecen al poco tiempo, dejando a los habitantes de esta colonia sin respuestas.
La situación económica de la familia es crítica. A menudo, no tienen suficiente para comer y Héctor se ve forzado a buscar trabajos temporales que no garanticen un ingreso fijo. A pesar de todo, no pierde la esperanza. Su mayor deseo es encontrar un empleo estable para poder ofrecer una vida más digna a sus hijas y darles lo necesario para su educación. Además, pide ayuda para mejorar su cocina, que está construida con materiales precarios como madera y láminas.
Los días de incertidumbre y lucha por sobrevivir son constantes, y Héctor sabe que la situación podría empeorar aún más si no encuentra apoyo. Quienes deseen colaborar con esta familia, ya sea con trabajo, materiales o apoyo económico, pueden comunicarse al 6181528735. La ayuda de la comunidad podría marcar la diferencia en la vida de esta familia.