El Gobierno del Estado de Durango extralimitó sus facultades, pues tomó la decisión de enajenar un terreno en el fraccionamiento Real del Mezquital, mismo que fue donado a una iglesia, algo que además de ocasionar molestia en los vecinos de la zona, las autoridades municipales son quienes tienen la competencia para tomar decisiones sobre este terrenos de más de 3 mil metros cuadrados; ante la problemática, se realizó una solicitud al Congreso del Estado para realizar un análisis de la situación a fondo y todo se realice de manera legal. Esta donación fue aprobada el pasado 30 de mayo por la Comisión de Hacienda del mismo Congreso del Estado, algo que se realizó mal de origen.