El regidor Jorge Silverio ha expresado la necesidad de mantener una vigilancia constante sobre los elementos de seguridad, particularmente en los retenes antialcohol. Ha destacado la preocupación de que no todos los agentes cumplen con sus deberes en dichos puntos de control. A pesar de la invitación realizada a la Comisión Estatal de Derechos Humanos (CEDH) para supervisar estos operativos, Silverio señala que la falta de personal abundante en la CEDH impide su presencia en todos los puestos de retén.
La escasez de personal de la CEDH plantea un desafío significativo para garantizar la integridad y el cumplimiento adecuado de las normativas en los retenes antialcohol. Dicha falta de presencia institucional deja un espacio propicio para que algunos agentes, aprovechando la situación, desvíen su conducta y recurran a prácticas indebidas, como solicitar dinero a los conductores a cambio de evitar una amonestación.
Un aspecto preocupante resaltado por el regidor Silverio es la posibilidad de que algunos agentes se aprovechen del avanzado equipamiento técnico utilizado en los retenes, como los bastones que pueden detectar incluso el consumo de una menta fuerte. Esta circunstancia, en lugar de ser una herramienta para fortalecer la seguridad vial, podría convertirse en una oportunidad para prácticas corruptas. La capacidad de los bastones para identificar sustancias con precisión se ve comprometida cuando algunos agentes desvían su propósito original y ven en esta tecnología una manera de obtener beneficios personales.
Para abordar esta problemática, el regidor propone una revisión exhaustiva de los protocolos de actuación en los retenes antialcohol y la implementación de medidas adicionales para prevenir prácticas corruptas. Sugiere que las autoridades competentes refuercen la supervisión en estos puntos críticos, ya sea mediante la asignación de más personal de la CEDH o la adopción de tecnologías adicionales que faciliten la detección de posibles actos de corrupción.
Es fundamental que las instancias gubernamentales trabajen de la mano con la CEDH para garantizar una presencia constante y efectiva en los retenes antialcohol. Además, la capacitación continua de los agentes de seguridad en ética y responsabilidad es esencial para mantener la integridad de estos operativos y prevenir situaciones que comprometan la confianza de la ciudadanía.