La psicóloga infantil y juvenil Karla Ayala ha señalado que Durango, México y el mundo están enfrentando una crisis de salud mental sin precedentes. Esta situación, que ella denomina como una "pandemia de salud mental", se ha exacerbado debido a los efectos colaterales de la pandemia de COVID-19. Ayala explicó que, aunque los problemas de salud mental ya existían antes del confinamiento, las restricciones impuestas para controlar la propagación del virus agravaron muchas condiciones preexistentes y desencadenaron nuevas.
Durante la pandemia de COVID-19, la salud mental se deterioró significativamente debido al aislamiento social, el estrés económico, la incertidumbre y el temor constante a la enfermedad. Estas circunstancias afectaron de manera especial a los adolescentes, un grupo particularmente vulnerable. La psicóloga destacó que los jóvenes han experimentado un aumento en los niveles de ansiedad, depresión y otros trastornos mentales debido a la interrupción de sus rutinas diarias, la falta de interacción social y las presiones académicas.
Karla Ayala hizo hincapié en la importancia de estar atentos a los signos de problemas de salud mental en los adolescentes. Es fundamental que padres, maestros y la comunidad en general estén alerta a cambios en el comportamiento, el estado de ánimo y el rendimiento académico de los jóvenes. Ayala recomienda establecer canales de comunicación abiertos y de confianza con los adolescentes, permitiéndoles expresar sus sentimientos y preocupaciones sin temor a ser juzgados.
Una de las herramientas que Ayala sugiere tener en cuenta es la "Línea de la Vida", un recurso de apoyo emocional y contención que puede ser vital para aquellos que están pasando por momentos difíciles. Este servicio ofrece asesoramiento y apoyo a personas en crisis, ayudándoles a manejar el estrés y las emociones negativas de manera constructiva. La Línea de la Vida se convierte en un recurso valioso no solo para los adolescentes, sino para cualquier persona que necesite ayuda en momentos de crisis.
Además, Ayala subrayó la importancia de buscar ayuda profesional cuando sea necesario. Los psicólogos, psiquiatras y otros profesionales de la salud mental están capacitados para proporcionar el apoyo necesario y desarrollar estrategias de intervención adecuadas para cada caso. No se debe subestimar el impacto de la salud mental en la vida diaria, y es esencial tratar estos problemas con la misma seriedad que se trataría una enfermedad física.