Esta mañana se llevó a cabo la incineración de casi media tonelada de narcóticos en el Campo Militar del 5 de Mayo, ubicado en la ciudad de Durango. El evento fue organizado por la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) en colaboración con la Fiscalía General de la República (FGR) y la Guardia Nacional. En total, se incineraron más de 488 kilogramos de marihuana, 53.7 gramos de clorhidrato de cocaína y 151 gramos de amapola, sustancias incautadas en diversas operaciones policiales.
El acto de incineración contó con la presencia de representantes de las tres órdenes de gobierno, quienes supervisaron la destrucción de estas drogas. Durante el evento, se destacó el esfuerzo conjunto de las autoridades federales, estatales y municipales en la lucha contra el narcotráfico, resaltando la importancia de evitar que estas sustancias lleguen a manos de jóvenes, adultos y niños de la región. La quema de narcóticos es una de las estrategias clave que utilizan las fuerzas de seguridad para reducir la disponibilidad de drogas en las calles y combatir el tráfico ilícito.
El proceso de destrucción de las sustancias se llevó a cabo bajo estrictas medidas de seguridad y conforme a los protocolos establecidos por la ley. La incineración tuvo lugar en las instalaciones del Campo Militar del 5 de Mayo, un espacio designado para este tipo de actividades por su capacidad para garantizar que los narcóticos sean eliminados de manera segura y definitiva, evitando así cualquier riesgo de que puedan ser reutilizados o comercializados nuevamente.
Las autoridades presentes, tanto de la Fiscalía General de la República como de la Guardia Nacional y Sedena, expresaron su satisfacción por los resultados obtenidos en las últimas operaciones antidrogas. Se subrayó que el combate al narcotráfico no solo es responsabilidad de las fuerzas de seguridad, sino que también requiere la colaboración de la ciudadanía para denunciar actividades ilícitas y fomentar la prevención del consumo de drogas.
Este tipo de acciones son fundamentales en el marco de la estrategia nacional de combate al narcotráfico, ya que permiten reducir la cantidad de drogas en circulación y, al mismo tiempo, envían un mensaje claro sobre el compromiso de las autoridades en la lucha contra el crimen organizado. La quema de narcóticos incautados es el resultado de investigaciones y operativos que se llevan a cabo de manera coordinada entre las distintas fuerzas policiales del país, con el objetivo de desarticular redes de distribución y prevenir el daño que estas sustancias generan en la población.
El evento concluyó con un reconocimiento al trabajo conjunto de las instituciones involucradas, destacando la importancia de seguir sumando esfuerzos en la lucha contra el narcotráfico y la protección de la ciudadanía. La incineración de estas sustancias representa un paso más en el compromiso de las autoridades por mantener a Durango y sus habitantes a salvo de las amenazas que el tráfico de drogas representa.