Inseguridad y desempleo; efectos secundarios de la pandemia

Dos de los efectos más marcados por la pandemia del COVID-19 en nuestro país son la inseguridad y el desempleo. A nivel nacional, la percepción de los mexicanos en cuanto a inseguridad en el mes de diciembre del año 2019 se encontraba en un 72,9%, 3 meses después, este porcentaje aumentaría a un 73,4% según datos oficiales del INEGI.

Dicha percepción de inseguridad sigue siendo mayor en mujeres, representando un 78,6%; en cambio para los hombres fue registrado sólo un 67,2%.

El estado de Durango no es la excepción, pues en el año 2019 más de la mitad de la población, es decir, un 64.7 % de habitantes, consideraron que la entidad era insegura.

 Antonio Bracho, Director de Seguridad Pública, comenta que Durango es una de las entidades con mayor índice de robos en comercios y casa-habitación, sobre todo las últimas semanas donde estos actos delictivos han ido en aumento.

Pero ¿Qué es lo que se está haciendo para combatir este problema? el mismo Antonio Bracho dice que en conjunto con los tres órdenes de gobierno están creando mesas de trabajo para realizar rondines de una mejor manera y así poder dar con las personas que normalmente crean estos delitos.

El desempleo también es un estrago que ha dejado la pandemia, pues según datos recolectados por la Secretaría de Trabajo y Previsión Social, del mes de Abril a Junio de este año, a nivel nacional se perdieron un total de 551,918 empleos. Lo que en Durango representa un total de 7,574 desempleados, es decir, un 4.16% de la población Nacional.

Los pronósticos que arroja la Secretaría en cuanto a desempleo durante el año 2020, están proyectados para el periodo de contención; es decir, se buscará la forma de encontrar los mecanismos de apoyo para el reinicio económico y poder estabilizar los números al cierre de este año. Se piensa que las pérdidas de desempleo continuarán, pero en una medida a la baja.