La matrícula escolar se refiere al número total de alumnos registrados en una institución educativa para recibir instrucción académica. Es un indicador clave que refleja la cantidad de estudiantes que forman parte de la comunidad estudiantil de una escuela.
En los últimos años, diversas instituciones educativas han reportado una disminución en su matrícula. Según el director del COBAED, Juana Villalobos Emiliano Alcántara, esta baja de matrícula se atribuye a varios factores que influyen en la deserción escolar.
Uno de los principales factores identificados es el contexto socioeconómico en el que se encuentran los estudiantes. Este contexto puede afectar significativamente la capacidad de los jóvenes para continuar con su educación, ya que las dificultades económicas pueden limitar su acceso a recursos educativos y generar la necesidad de trabajar para contribuir al sustento familiar.
El análisis realizado en la institución ha revelado un patrón consistente en los últimos años, en el que el contexto socioeconómico se correlaciona estrechamente con las tasas de deserción escolar.
Además del contexto socioeconómico, otro factor determinante es la situación económica individual de cada estudiante. Las dificultades financieras pueden impedir que algunos jóvenes asistan regularmente a la escuela, ya sea debido a la necesidad de trabajar para ayudar en el hogar o a la imposibilidad de costear los gastos relacionados con la educación.
Se observa una variación significativa en el número de alumnos antes y después de las vacaciones escolares, lo que sugiere que este período puede ser un momento crítico en el que se producen importantes cambios en la matrícula estudiantil.
Para ilustrar esta tendencia, en el ciclo escolar 2021-2022, la matrícula total fue de 516,709 estudiantes. Sin embargo, al inicio del ciclo 2023, aproximadamente 450,000 alumnos regresaron a clases, lo que representa una diferencia de más de 100,000 estudiantes que han abandonado el sistema educativo.
Ante esta situación, es fundamental implementar estrategias y programas que aborden las causas subyacentes de la deserción escolar y brinden apoyo integral a los estudiantes y sus familias. Garantizar el acceso equitativo a la educación y crear entornos escolares inclusivos y enriquecedores son pasos clave para abordar este desafío y promover la permanencia de los jóvenes en el sistema educativo.