Miércoles de ceniza, da inicio la cuaresma

El Miércoles de Ceniza marca el inicio de la Cuaresma, el período de 40 días (sin contar los domingos) que antecede la Semana Santa. Este día, en Durango, cientos de fieles se reunieron para asistir a la misa y recibir la ceniza, un acto simbólico que representa el arrepentimiento y la preparación espiritual para la resurrección de Jesús.

Para muchos duranguenses, esta tradición forma parte de su vida cotidiana. Año tras año, la Iglesia se llena de devotos que, con la frente marcada por la ceniza, se disponen a reflexionar sobre su fe y su relación con Dios. Más allá del acto religioso, el Miércoles de Ceniza es un reflejo de una cultura profundamente arraigada en la región, que sigue presente en las calles, en las familias y en las costumbres.

Aunque en el contexto actual la observancia de la Cuaresma ha evolucionado, y no todos siguen estrictamente las prácticas tradicionales, el Miércoles de Ceniza sigue siendo un punto de encuentro para quienes buscan un respiro espiritual antes de la Semana Santa. La misa no solo es una ocasión religiosa, sino también un recordatorio del paso del tiempo, un momento para la reflexión personal y colectiva.

Este día, marcado por la solemnidad y la devoción, es más que una tradición religiosa; es un punto de unión cultural que cruza generaciones, vincula a la comunidad y pone de manifiesto la importancia de la fe en la vida diaria de los duranguenses. Sin duda, el Miércoles de Ceniza sigue siendo una de las fechas más relevantes para quienes viven la cuaresma con un sentido profundo de espiritualidad.