La Coordinación de Protección Civil llevó a cabo rondines de inspección en respuesta a las condiciones climáticas adversas, específicamente la caída de lluvias y aguanieve en áreas cercanas a la capital. Este despliegue se realizó con el objetivo de salvar la seguridad y el bienestar de la ciudadanía frente a los efectos potenciales de estas condiciones meteorológicas. Durante los rondines, se centraron en supervisar el uso de calentones y anafres en los hogares locales, así como en brindar apoyo a aquellas personas que pudieran encontrarse en situaciones de mayor vulnerabilidad.
Uno de los aspectos críticos abordados durante los rondines fue la inspección del correcto uso de calentones y anafres en los hogares. Estos dispositivos, aunque proporcionan el calor necesario en condiciones climáticas adversas, también representan un riesgo potencial si no se utilizan de manera adecuada. Por tanto, la Coordinación de Protección Civil se dedicó a verificar que los ciudadanos estuvieran utilizando estos aparatos de manera segura, evitando posibles incidentes como fugas de gas o incendios.
La atención a las personas más vulnerables fue otro foco importante de los rondines. Conscientes de que ciertos segmentos de la población, como los adultos mayores o aquellos en situación de calle, podrían ser más susceptibles a los efectos adversos del clima, se brindó apoyo para garantizar que estas personas se resguardaran en lugares seguros. Esto incluyó la identificación y habilitación de refugios temporales, donde aquellos que lo necesitaban podían encontrar refugio y resguardo ante las inclemencias del tiempo.
La acción proactiva de Protección Civil subraya la importancia de la prevención y la asistencia directa durante condiciones climáticas desafiantes. La coordinación anticipada y la presencia en el terreno permiten no solo abordar posibles riesgos inminentes, como los asociados con el uso de dispositivos de calefacción, sino también proporcionar apoyo práctico a quienes enfrentan mayores dificultades durante eventos climáticos extremos.
Es crucial destacar que estas iniciativas no solo responden a situaciones de emergencia, sino que también promueven la conciencia y la preparación comunitaria. La presencia de Protección Civil en el terreno no solo garantiza una respuesta efectiva a las condiciones climáticas adversas, sino que también contribuye a fortalecer la capacidad de la comunidad para enfrentar y mitigar los riesgos asociados con eventos meteorológicos extremos.