El poner candados económicos a supuestos líderes sociales fue un acierto, ya que el recurso que recibían sin sustento alguno, se pudo utilizar en proyectos de obra pública; a pesar de las manifestaciones que estos líderes realizaron en diversas ocasiones para demostrar su descontento a esta decisión tomada por las autoridades municipales, no hubo tregua para seguir con esta mala práctica de "regalar" dinero para beneficio personal y no de la ciudadanía. Los buenos resultados que se pudieron obtener de esto, servirá como un ejemplo para la administración entrante y así puedan valorar el continuar con este tipo de filtros.