Según datos de la Encuesta Nacional de Victimización y Percepción sobre Seguridad Pública (ENVIPE), se estima que el 17.8% de los hogares en el estado de Durango tuvo al menos una víctima de delito durante el año 2021.
En el fraccionamiento San José, ubicado en los límites con el fraccionamiento San Juan, se enfrenta a una problemática recurrente de robos de diversos objetos. Incluso la escuela local ha sido víctima de esta situación. Esta problemática se extiende más allá de la primaria, afectando a las casas y otras instituciones educativas cercanas. Según los docentes y algunos vecinos, esta ola de robos está vinculada con la calidad de vida en esta área.
En el fraccionamiento Los Duraznos, la situación es similar. En la unidad deportiva, han sido sustraídos diversos objetos. En el fraccionamiento Huizache 1, los vecinos también han reportado robos. En una de las casas allanadas, aparecen regularmente pallets de madera, cuya procedencia es desconocida para los residentes, lo que genera temor de que estén siendo robados de algún lugar cercano.
En cuanto a la incidencia delictiva en Durango, el robo de automóviles y casas habitación ocupan el tercer y cuarto lugar respectivamente, según la ENVIPE 2022. Además, el robo o asalto se sitúa en el sexto lugar entre los delitos de alto impacto en todo el estado.
De los 219,782 delitos estimados en el estado de Durango, la víctima estuvo presente en el 49% de los casos, lo que equivale a 107,606 veces que alguien fue una víctima directa. Además, en 31,205 casos, la víctima sufrió agresión física, según los mismos datos de la ENVIPE.
Estas cifras revelan la urgente necesidad de abordar la seguridad pública en Durango, así como la importancia de implementar medidas preventivas y estrategias de protección para combatir la delincuencia y proteger a los ciudadanos y sus propiedades. Es fundamental que las autoridades y la comunidad trabajen juntas para encontrar soluciones efectivas que mejoren la calidad de vida y la seguridad de todos los habitantes del estado.