Las rachas de viento registradas el pasado lunes en la ciudad de Durango dejaron a oscuras a buena parte de los comercios del centro histórico. Los comerciantes tuvieron que organizarse para evitar actos de rapiña en los negocios afectados.
La presidenta de la Cámara Nacional de Comercio en Pequeño (Canacope) Beatriz Zamora detalló que si bien están conscientes de que el viento puede causar afectaciones en la infraestructura de la ciudad la demanda es que la respuesta de la Comisión Federal de Electricidad sea oportuna para evitar daños al comercio.
"Varias calles no tuvieron luz, todavía hasta la madrugada que estuvimos observando, como se apagan cámaras tenemos que estar vigilando nuestros negocios que no pase nada, para evitar saqueos que ya han pasado aquí en el Centro Histórico", detalló.
La afectación por la interrupción de la energía eléctrica se extendió por las calles que concentran la actividad económica en el centro de la ciudad, tales como Patoni y Pasteur, de ahí que fue necesario activar recorridos durante la madrugada.
Respecto a las afectaciones, la Presidenta del comercio en pequeño apuntó que se siguen cuantificando, lo que se suma al bajo nivel de ventas registrado durante la semana que recién terminó.
Añadió que la falta de circulante es un fenómeno que afecta no solo a los comerciantes sino también a los ciudadanos y ello se traduce en bajos niveles de ventas.