Este 10 de enero, Durango tuvo un cambio en el semáforo epidemiólogo, por lo que pasó a color amarillo, debido a esto, el vocero de la arquidiócesis de Durango, Noé Soto Valdez, señaló que se continuarán las actividades, sin embargo se reducirá el aforo en un 75 por ciento, esto ante las recomendaciones por parte del gobierno estatal como medida preventiva a la pandemia por COVID-19.
Soto Valdez, expresó que esperan una buena disposición de los fieles, para que ayuden a mantener estas medidas preventivas, agregó que continuarán con las tradiciones de las eucaristías en vivo a través de los medios de comunicación y redes sociales, de tal manera que quienes no puedan asistir de manera presencial, puedan continuar con el alimento espiritual.