Ante la cifras que se dan a conocer a nivel nacional, donde se estiman que en Durango hay 530 cadáveres sin identificar en la fosa común, el diputado local José Antonio Ochoa comentó que esto es producto de la violencia de sexenios pasados, pero es un tema que se debe enfrentar y mejorar las estrategias de seguridad comenzando por erradicar la violencia en los hogares y fortaleciendo el tejido social.