En todas las parroquias de la ciudad se registró una notable afluencia de feligreses, quienes se sumaron con fervor y respeto a las celebraciones litúrgicas y representaciones. Parroquias como Nuestra Señora de los Ángeles, el Sagrado Corazón de Jesús, la parroquia San Francisco de Asís en la colonia Zarco y la Catedral Basílica Menor de Durango fueron testigos de una gran participación. Desde temprana hora, familias enteras, jóvenes, adultos mayores y visitantes se congregaron para acompañar el recorrido de las catorce estaciones, en un ambiente de oración, silencio y recogimiento.
La representación realizada en la Parroquia de Santa Rosa de Lima, en las calles del Fracc. Jardines de Durango con más de 1000 personas aproximadamente, destacó por la entrega de los jóvenes organizadores, quienes durante semanas trabajaron en la preparación del elenco, vestuario, escenografía y logística del evento. Gracias a su esfuerzo, la actividad no solo logró una excelente organización, sino también una profunda conexión espiritual entre los participantes, principalmente en el papel de Jesús, interpretado por Samuel, que al término, no pudo controlar las lágrimas al ver a su abuelita acompañarlo y dándole la mano como la misma María Madre a su Hijo Jesús.
Esta representación formó parte de las actividades realizadas en toda la Arquidiócesis de Durango, donde se vivió con gran fervor una de las celebraciones más significativas de la Semana Santa: el Santo Viacrucis.
El Viacrucis es una tradición que año con año cobra más fuerza en Durango, consolidándose como una expresión viva de la fe católica. En cada parroquia, la comunidad se volcó a las calles no solo para presenciar una representación teatral, sino para meditar y acompañar simbólicamente a Jesús en su camino hacia la cruz.
Este 2025, las celebraciones del Viernes Santo reafirmaron el compromiso de los fieles con su fe, y dejaron ver una Iglesia viva, unida y profundamente enraizada en las tradiciones que fortalecen el espíritu comunitario en toda la arquidiócesis.