Aseguran más de 443 mil litros de hidrocarburo en Tabasco
La Fiscalía General de la República (FGR) ha intensificado sus esfuerzos para combatir el robo de hidrocarburos en México, un delito que ha cobrado gran relevancia en los últimos años debido a sus profundas implicaciones económicas y sociales
Recientemente, la FGR, a través de su Fiscalía Especializada de Control Regional (FECOR), llevó a cabo un operativo en el municipio de Centro, Tabasco, donde se incautaron aproximadamente 443 mil 980 litros de un líquido que se asemeja al hidrocarburo, además de 22 vehículos y otros equipos relacionados con la extracción ilegal.
Este operativo fue el resultado de una investigación iniciada por el Ministerio Público de la Federación (MPF), en colaboración con diversas fuerzas de seguridad, incluyendo la Guardia Nacional y la Secretaría de la Defensa Nacional. La acción se realizó bajo la supervisión de un juez especializado en el Sistema Penal Acusatorio, lo que subraya la seriedad con la que se aborda este problema en el país. Los elementos asegurados han sido puestos a disposición del MPF para continuar con las indagatorias pertinentes.
El robo de hidrocarburos, conocido localmente como "huachicoleo", ha generado pérdidas anuales para el Estado que alcanzan los 60 mil millones de pesos (cerca de 3 mil millones de dólares)
Las autoridades en México manejan el hidrocarburo recuperado a través de un marco regulatorio y estratégico que busca maximizar la producción y asegurar el suministro interno
La forma más común en que se lleva a cabo el robo es mediante la perforación clandestina de ductos. Grupos del crimen organizado utilizan métodos sofisticados, como túneles subterráneos, para acceder a los oleoductos. Estas actividades no solo representan un riesgo económico, sino que también conllevan peligros ambientales y sociales. Las fugas ocasionadas por estas tomas ilegales pueden resultar en incendios devastadores y daños irreparables al medio ambiente.
Las autoridades han implementado diversas estrategias para mitigar este problema. Desde el cierre temporal de ductos hasta la movilización de fuerzas armadas para asegurar áreas críticas, estas acciones buscan desmantelar las redes criminales involucradas en el huachicoleo