Como parte de una investigación por un caso de maltrato animal que generó indignación en el municipio de Ojuelos, Jalisco, agentes de la Fiscalía del Estado realizaron un cateo en un domicilio donde localizaron dos rifles de municiones, conocidas como "copitas" o "diábolos" y un pasamontañas con camuflaje.
El cateo forma parte de las diligencias iniciadas tras la denuncia contra un adolescente de 15 años, presuntamente hijo del delegado de la comunidad de La Granja, quien habría sido señalado por vecinos como el responsable de agredir brutalmente a una perrita preñada.
De acuerdo con las versiones, el menor arrastró con una motocicleta al animal, le disparó y le cortó las orejas con tijeras de podar, hechos que habrían ocurrido la noche del domingo 6 de abril.
La diligencia se llevó a cabo la mañana y tarde del miércoles 9 de abril, luego de que el Juez Primero Especializado en Control, Juicio Oral, Justicia Integral para Adolescentes y Ejecución Penal del Tercer Distrito Judicial autorizara la orden de cateo, como parte de las indagatorias para esclarecer los hechos.
Los agentes investigadores, distribuidos en tres unidades y acompañados por personal del Ministerio Público y autoridades del Distrito III, se presentaron en el inmueble señalado. Al no recibir respuesta tras tocar en repetidas ocasiones, ingresaron conforme al protocolo. El domicilio se encontraba vacío, pero durante la inspección hallaron los objetos mencionados en una de las habitaciones.
En Jalisco, el Código Penal contempla penas de dos a tres años de prisión, así como multas de hasta 113 mil pesos, para quien provoque intencionalmente la muerte de un animal.